Cervicalgia
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La cervicalgia es un término médico que se refiere al dolor en la región del cuello. Es una condición común que puede afectar a personas de todas las edades y que puede variar desde una leve molestia hasta un dolor intenso que limita la movilidad.
La cervicalgia puede estar asociada con la tensión muscular, problemas en los discos intervertebrales, artritis, o incluso estrés. Este dolor puede irradiarse a los hombros, brazos y cabeza, causando dolores de cabeza y otros síntomas asociados.
En Fisiosan, tratamos la cervicalgia mediante un enfoque multidisciplinario que combina varias tecnologías y técnicas terapéuticas avanzadas. Los tratamientos incluyen:
- Fisioterapia especializada: Ejercicios y técnicas manuales para aliviar la tensión muscular, mejorar la postura y aumentar la movilidad del cuello.
- Tecnología Indiba: Utiliza radiofrecuencia para reducir la inflamación, mejorar la circulación y aliviar el dolor en los músculos del cuello.
- Láser de alta frecuencia: Ayuda a reducir la inflamación y el dolor, acelerando la recuperación de los tejidos.
- Descompresión robotizada: Alivia la presión sobre los discos intervertebrales y mejora la alineación de la columna cervical.
- Terapia de ondas de choque: Estimula la regeneración de tejidos y alivia la tensión muscular en el cuello y los hombros.
- Ecografía Vinno E10P: Permite una evaluación detallada de los tejidos y estructuras del cuello para un tratamiento más preciso.
La cervicalgia puede tener múltiples causas, entre las más comunes se encuentran:
- Tensión muscular: El estrés, la mala postura, y el uso excesivo de dispositivos móviles pueden causar tensión en los músculos del cuello.
- Problemas en los discos intervertebrales: Hernias discales y degeneración de los discos pueden provocar dolor en la región cervical.
- Artritis: La osteoartritis y otras formas de artritis pueden afectar las articulaciones del cuello, causando dolor y rigidez.
- Lesiones: Accidentes como el latigazo cervical (whiplash) pueden resultar en una cervicalgia aguda o crónica.
- Factores psicológicos: El estrés y la ansiedad pueden contribuir a la tensión y el dolor en el cuello.
Preguntas frecuentes